Las Pampas
Las Pampas
Es probable que las pampas sean culturalmente la ecorregión más importante para Argentina, en parte porque Buenos Aires y su economía fueron levantadas en torno a ella.
Son el escenario de la tradición campestre, esas praderas amarillentas que recorren los gauchos entre ranchos y vacas, y cada tanto algún ombú. Estas ideas perduran en mayor o menor medida en el imaginario que se tiene hoy de “el campo”, especialmente en Buenos Aires.
Son pastizales templados en el centro de Argentina, que abarcan 426.000 km² en las provincias de Buenos Aires, La Pampa, Santa Fe, Entre Ríos y Córdoba. Los primeros viajeros europeos en lo que hoy es Argentina describen a las pampas como un “mar de pastos”: como es una región donde casi no hay sierras y los árboles son escasos, hacia el horizonte no se veía más que pasto. Pero viéndolas en detalle las pampas son mucho más que eso: sólo considerando los pastos, al menos hay 370 especies diferentes, que son hogar de unas 400 especies de aves como el ñandú, o 100 de mamíferos, aquí representados por la mulita pampeana.
A medida que avanzó el proceso de colonización en Buenos Aires, las pampas comenzaron un recorrido que continúa hasta nuestros días: más del 60% de las pampas se fueron convirtiendo en terrenos productivos para la agricultura y ganadería. Los pastizales fueron desapareciendo y con ellos, la fauna que habitaba en ellos. Hoy, menos del 1% de esta ecorregión se encuentra conservada.
La solución a estos problemas hoy depende de políticas públicas para ampliar la protección de los pastizales y generar soluciones para que los propietarios de tierras puedan regular sus actividades de forma sostenible, con buenas prácticas agrícolas y ganaderas.
También es necesario poner nuestras pampas en valor. Por esta razón forman parte de la colección de Bioma en este póster diseñado por Santi Pozzi.
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